Su pequeña mano abandonada al sueño


JULIETA VALERO










Su pequeña mano abandonada al sueño
y que mi miedo observa como súcubo en la rama del  asombro: eras
inconcebible como la                                  .

En el cestillo de esa mano la conciencia, obviedad tras el diluvio, y un almanaque de hojas
que agita mi cometa premonitoria o estrategia de este roedor sin parientes, présbita,
yo:

mujer tan pequeña que sólo supura mariposas cerebrales ante el vaporcillo de la
ternura que

avanza,

toma impulso en los ojos de su madre,

íntegra y astrónoma,

hacia todo género de amanecer.




(de Los tres primeros años, Vaso Roto, 2019)