sin título


ARANTXA ROMERO










nos amábamos también en las horas bajas
nos abrazábamos con ternura, nos besábamos poco
y nos hacíamos reír
aplacábamos así las oscuridades de vida   
las dadas y las sobrevenidas

nos amábamos de otra forma
sin fuegos artificiales apenas sexuales
incómodos pero convencidos
en pequeños gestos y diarios cuidados
aguardábamos un tiempo mejor
una vuelta o quizás una nueva etapa
estábamos cansados pero este
trabajo no queríamos dejarlo

temerosos de que esas malas fuerzas
también lo tumbaran
tumbaran aquello eso que era
lo más allá de los dos
temíamos y callábamos
para seguir guardando su misterio
el poquito que fuera
ahora lentos en nuestra conquista
con una debilidad que sonaba a fortaleza
incluso en las horas bajas
de este largo
exhausto amor