Anestesia general

MARTA FUEMBUENA










Parpadea. Abre los ojos. Aletea. Cierra los ojos.

El nivel del mar es una reproducción de nuestra horizontalidad, del trance inexpresivo de los miembros decadentes, de la constelación de las pecas rescatadas de un pozo. Escucha, no serás medusa transparente en el fondo del hielo nocturno. Escucha, no hablarás con tu cuerpo en ese agujero negro que es la eternidad. El agujero es la nada, todo lo traga. Recuerda, de este mundo no nos vamos, nos echan.

Abre los ojos. Parpadea. Aletea. No cierres los ojos.

Salen los límites del cuerpo a zanjar este desierto, en las luces de unas calles encerradas en sí mismas. Oíd el chasquido de sus huesos frente a la acera. Oíd la quietud con la que se incineran en los parques, en la losa-tumba, en la mirada ajena, en el blanco que les impide avanzar.





Notas del deshielo

Agua: Solución líquida, incolora, insípida e indolora. Río, laguna, mar, espejismo, reflejo, cielo. Hueso, tendón, músculo, carne.

Nieve: Potencial espuma efímera para abastecer a los incrédulos de algo de pureza. Posibilidad, también, de hacer el ángel en un manto de nieve.

Hielo: Bloqueo físico y mental, gracias al cual podemos evitar la domesticación de la tierra, es decir, nosotros. Islas.